A veces me siento como si estuviese en una nube.
Me siento ligera.
Sin cargas a mis espaldas.
Libre como una cometa
que se ha escapado de las manos de su dueño
y vaga por el cielo coloreando el horizonte.
Vuelo.
Salto.
Grito.
No me callo nada.
No siento temores.
Dejo la mente libre y mi espíritu se tranquiliza.
Duermo tranquila
y sueño despierta.