3 de enero de 2007

Para cuando te Sientes Vivo


Nuevos aires.
Días de escapada. De respiro.
En los que empiezas a correr sin rumbo fijo,
y te quedas mirando el horizonte durante horas.

Siestas. Sobre la hierba. En el campo. Bajo el sol.

Agua. Sobre tu pelo. En la calle. Mientras llueve.

Segundos donde vives fuera de ti
en un mundo con sentido y maravilloso.

Te sientes libre por un instante.
Gritas sin miedo a ser callado.
Ríes porque te sientes vivo.

Momentos en los que te das cuenta
lo grandioso que es vivir
la belleza de la vida.